6.11.09

Ley

Hace algunos días mi jefa recibió en su buzón electrónico dos correos de distintas casas editoriales solicitandole que revisara un manuscrito para evaluar su viabilidad y su eventual publicación. El único problema era que ambas solicitudes acompañaban al mismo manuscrito.

Sacrilegio!!!!

Resulta ser que dentro de las reglas que imponen los editores de muchas revistas es que cuando sometes un artículo para revisión en una revista dada no lo envies al mismo tiempo a otra revista.

A mi en lo personal nunca me ha quedado claro el porque de semejante regulación, y he de decir que el debate que se dió aqui en el laboratorio cuando expresé mi duda tampoco ayudo a clarificar mucho donde estaba el problema.

Una parte de los argumentos venía desde el punto de vista de mentir. Ahber dicho que uno no lo iba a enviar a dos revistas y haberlo enviado. Ningún científico puede mentir abiertamente asi, es deshonesto y uno de los pilares de la ciencia es la honestidad.

Pero eso no llega a la raíz del conflicto. ¿Cual es el motivo por el que solicitar la revisión de un artículo por parte de dos casa editoriales al mismo tiempo es en si mismo algo que debe evitarse a toda costa?

Vinieron entonces argumentos de eficiencia. Sería un gasto enorme de tiempo, nadie podría hacer su trabajo. Quizá eso sea cierto, pero ¿es suficiente como para ser tratado criminalmente, como una de las mas grandes ofensas que pudiera realizar un científico?

Tomemos en cuenta que las opiniones de aquellos que se sentían directamente agraviados por la conducta de estos individuos solicitaban castigos tales como: Una prohibición de publicaciones por parte de dichos individuos durante cinco años (pena de muerte para una carrera científica).

Luego entonces la reflección es, de donde vienen las leyes, que pasa con los castigos sociales, aquellos que no están escritos pero que son llevados a cabo por la sociedad en general. Lo que algunas personas llaman "presión de grupo". Nadie te obliga a vestirte de un modo particular, pero solo los que se visten de ese modo particular son miembros del club. ¿Cada cuando se deben revisitar las normas? y ¿que tanto es válido que el individuo se pregunte si las leyes y las normas que rigen ciertas situaciones son aún válidas o no?

En fin, yo sigo sin entender, y por mas que en ocasiones intento meter pedazos del mundo al interior de mi mente, no termino aún de lograrlo.

3 comentarios:

Eva dijo...

Yo sólo he arbitrado un puñado de artículos, pero cada una de las veces que lo he hecho me he sobado el lomo escribiendo mis reportes. Implica mucho trabajo, tiempo y dedicación hacerlos, así que si me enterara de que después de que yo hice ese trabajo, gratis, y por el beneficio de la comunidad, los autores retiran el trabajo porque se fueron a la revista de enfrente... jamás vovería a aceptar arbitrar artículos de esa revista, y ciertamente de esos autores.

Más allá de razones comerciales y morales, simplemente creo que permitir envios simultaneos a multiples publicaciones mataría el sistema de arbitraje. A pesar de ejemplos contrarios (que todos tenemos), el sistema se basa en la buena fé de los miembros de la comunidad.

m dijo...

no solo mata el sistema de arbitraje, mata el sistema de originalidad. en principio, un mismo trabajo no puede ser publicado dos veces, pues rompe todos los principios de derecho de autor (que son) de la casa editorial, el envíar un trabajo, es iniciar el proceso de su publicación. semejante a que un cantante grabara el mismo disco con dos compañias diferentes.
la ciencia (y también las patentes) se basan en la originalidad del trabajo, en el conocimiento nuevo. un mismo conocimiento no puede ser nuevo dos veces.
que los mismos autores publiquen dos veces el mismo trabajo a todas luces resulta inmoral. si ese trabajo hubiese llegado a arbitros diferentes tendrían dos artículos más en su curriculum.
besos

Eva dijo...

Me supongo que la intención de los autores era retirar el manuscrito de una de las revistas si la otra lo aceptaba, no creo que lo quisieran publicar dos veces. Lo que querían era ganar tiempo, expandiendo sus posibilidades de publicación, mientras claramente despreciaban el trabajo de arbitraje.