Cinco años

Ayer estaba en el baño lavandome los dientes cuando, dado el set de ircunstancias que lo precedió, tuve una insight interesante.

Primero el set de circunstancias.

Alguna vez en un programa que se llamaba Dos horas De Brayan, que conducían el Warpig y el Reverendo en Radioactivo 98.5 fm de la Ciudad de México ( y que luego se transformó en Gaba Gaba en Reactor 105.7 fm) , si no mal recuerdo lunes y miércoles a la media noche, pusieron una canción que se llama: Soy un Vegetal http://www.youtube.com/watch?v=NQgx0s4eYPg de una banda que se llama Shock Treatment.

Esa rola es de las que solo tuve que escuchar una vez y listo, le habló a lo más profundo de mi cerebro reptil, le habló a mi amor por el cine guajolotero y a mi deseo de expandir por siempre mi espacio musical mental.

Corte a, Shock Treatment es una banda de punk española. Eventualmente me hice de su música vía torrent y el internet.

El año pasado, la que en algún momento fue su disquera, sacó al mercado una antología con todo el material grabado de ellos http://www.notomorrowrecords.com/VPC/paginas/Antologia_Shock_Treatment.html. Hace mucho tiempo que no le daba mi dinero a nadie a cambio de música que no fuera en vivo, pero ellos se lo merecen.

La antología trae un pequeño booklet donde los miembros de la banda platican acerca de como se formaron y eso. Aún no lo termino, pero lo importante es que empezaron a tocar sus instrumentos como a los once años, y formaron su grupo al inicio de la prepa como a los 16. Cinco años

Yo llevo como un año aprendiendo a tocar batería y la verdad es que voy progresando mucho.

El insight en el baño fue el siguiente:

Cuando alguien empieza a tocar a los 14 y tiene su primer grupo a los 19, han pasado cinco años de entrenamiento musical. Si alguien empieza a tocar a los 37 y ya puede tocar cuando tiene 42, han pasado los mismos cinco años.

Pero de cierto modo ambas afirmaciones no parecen ser equivalentes en la mente. Como si la ventana de tiempo entre los 14 y los 19 fuera válida, pero la ventana entre los 37 y los 42 ya no.

No sé porque los adultos se han robado la oportunidad de aprender nuevos idiomas, creo que el problema es que nadie espera encontrar un adulto incapaz. La gran mayorìa de nuestras interacciones son con adultos capaces, que ya saben hacer las cosas, y no con adultos que están aprendiendo.

Cero que el mundo sería un lugar mejor si dejaramos de cerrar las ventanas de oportunidad.

Yo en lo particular si creo que cuando tenga 42 ya voy a ser un baterista hecho y derecho.