7.6.04

Me voy a extender sobre el concepto del I want Out.

Hacia mediados del internado, me empezó a quedar claro que la parte clínica de la medicina no me atraía lo suficiente como para dedicarle una vida. Sin embargo, me daba la impresión que aun no había probado el ser médico en realidad y solamente estaba experimentando el ser un sacachambas mas del sistema. De ese modo decidí que para poder tomar una decisión realmente conciente era necesario hacer el servicio social en medicina clínica y terminar de definir la situación.

Mi contacto con la ciencia en realidad había sido poco, y solo a través de un maestro de la facultad, quien hacia investigación en mecanismos de presentación antigénica. El resto de mi entusiasmo por la ciencia emanaba de dos sitios muy claros. Uno era la lectura avida de la literatura científica,misma que al dia de hoy no cesa de sorprenderme y maravillarme. El otro sitio de donde surgía mi entusiasmo era de la idea abstracta de intentar entender a la naturaleza.

Es asi como regresando a la ciudad de méxico después del servicio social me di a la tarea de hallar un laboratorio de inmunología para hacer un doctorado y dedicarme de una vez por todas a la investigación científica. El hecho de hacer un doctorado en méxico y no en el extranjero respondia al hecho de aprender lo suficiente de México y en México para sacarle provecho real a las posteriores estancias en el extranjero, donde las restricciones presupuestales no son tan amplias.

Mi primera aproximación a este problema fue a través del que fue mi maestro de inmunología en la carrera. Desafortunadamente el había movido su laboratorio del Centro Médico, lugar que me quedaba relativamente accesible, al Cinvestav, que era practicamente mudarse de ciudad. Sin embargo a través de el y del contacto con otra doctora en un instituto en cuernavaca, me recomendaron al que es mi actual jefe.

Cuando asistí buscando un laboratorio en el cual desarrollar un proyecto doctoral, me entreviste con mas investigadores, pero la realidad es que la entrevista con mi actual jefe fue la que mas me convenció.

Y asi empezó el doctorado...

Probablemente en una siguiente entrega me dedique a detallar las muchas cosas que sucedieron in-between, pero aqui me voy a adelantar a ello para llegar a donde estoy el dia de hoy.

Mi jefe y yo sufrimos una larga serie de desencuentros a través del doctorado, nunca logre entender todo lo que el queria de mi, y yo nunca logré transmitirle que era lo que yo esperaba de el. Finalmente la situación se convirtió en un diálogo de sordos iluminado de vez en cuando por buenos momentos.

Dentro de una semana mi jefe se va a ir de México a hacer un sabatico en USA. Hemos quedado de hablar para definir cual será el perfil de los siguientes seis meses en los que aún seré un becario en su laboratorio. El dia de hoy es la tercera cita informal para tal hecho y aun no ha llegado. Dada la hora a la que narro estos hechos, lo mas probable es que no llegue.

Quien sabe que suceda, pero entre las mil cosas que me intentó transmitir mi jefe, fue la de nunca dejar las cosas para los últimos días, y pensaría yo que finalmente logrará transmitirme ese conocimiento, aún si lo hace de una manera paradójica.

Ya me cansé de esta dinámica improductiva que se ha dado entre nosotros.

I want Out

1 comentario:

Armando dijo...

Things will happen while they can, me dijo una doctora en astronomía hace no mucho tiempo, citando una famosa rola ochentera