La premisa principal de "Dispareunia", la primer novela del obscuro bloggero de culto Verde, es en papel buena, pero la ejecución, en papel, deja al lector con un amargo sabor de boca, como una promesa incumplida.
Dispareunia cuenta la historia de Juan y Eva, una pareja de jovenes profesionistas en un matrimonio, sino prefecto, si funcional. Pero con un problema, Eva es incapaz de gozar de sexo. Simple y sencillamente el dolor le impide disfrutar, de ahi el título de la novela. Juan por su parte intenta mantener la sanidad mental a través de su amante, quien puede mantener gracias al velo de su profesión. La medicina le demanda muchas horas lejos de su casa.
Es con ese planteamiento que comienza la historia. Mas precisamente en el momento en que Eva descubre la infidelidad de su marido. Y tras recriminarse el problema, buscar justificaciones e intentar entender, decide que simplemente el único camino real que le queda es el de la venganza.
Dicho camino lllevará a Eva a confontar los motivos de su dispareunia y finalmente conquistarlos para terminar liberada de todo conflicto, incluyendo al marido y a la amante.
La novela está escrita desde el punto de vista de los tres personajes principales y se desenvuelve, de manera muy artificial, en un periodo de 24 horas que comienzan con el orgasmo de Juan a manos de su amante y el despertar de Eva de un sueño intempestivo. La artificialidad de la novela radica en la práctica imposibilidad de conseguir venganza y redención en 24 horas, y los eventos significativos se amontonan con el solo propósito de llevar a los personajes a un lugar donde ya se les veía desde los priemros capítulos de la historia.
Sin embargo, el libro cuenta con pasajes notorios que no se borraran facilmente de la imaginación de los lectores, como el episodio de los electrodos, donde el detalle descriptivo lo pone a uno justo en el borde de la guillotina mirando hacia abajo durante la caida libre sintiendo cada uno de los tejidos abrirse bajo el filo inmisericorde de la cuchilla y el peso incontenible que impide separar los ojos de las páginas.
Aún cuando los personajes de Dispareunia se encuentran purificados al momento de tocar la contraportada nunca queda claro si podrán reencontrarse en un mundo que seguramente en los dias subsecuentes a la experiencia les parecerá blando y falto de sabor.
Dispareunia es un viaje de reencuentro personal y purificación, de aceptación de la naturaleza humana, de gozo y crecimiento. Tristemente la impresión final que deja el libro es la de un diamante en bruto, se puede ver la belleza al interior, pero hace falta trabajar mas para que el brillo sea perfecto.
3 comentarios:
Aclarando que el autor tomo prestado mi nombre pero no mi historia, afortunadamente no padezco la condición mencionada. No está de más decirlo.
Suena muy interesante, la descripción y como relatas la historia me dejó tentado a leerlo ¿tu lo has escrito? Si es así quiero una copia.
Un abrazo Verde, te sigo desde hace tiempo, aunque no soy muy comentador.
Si se llega a publicar o simplemente tienes interés en que alguien lo lea, avísame, Saludos.
Mi novela se llamaría Anedonia.
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