26.9.05

Interactuar

El sistema nervioso se originó hace quien sabe cuanto tiempo. Un grupo de células dedicadas exclusivamente a estudiar la realidad en un nivel macroscópico.

Un tiempo después la evolución (mutaciones al azar y sobrevivencia de los mas aptos) seleccionó la opción que permite la comunicación intraespecie con altos niveles de complejidad. Organizarse en manadas que entienden un mismo código facilita hecharle montón a los animales grandes y cosas por el estilo.

Los circuitos neuronales sobre los que se asienta el lenguaje se desarrollan durante los primeros años de la vida. De hecho, después de los 4 años es muy difícil aprender un lenguaje. No me refiero a una lengua, no, me refiero a un lenguaje. Una especie de sistema operativo.

El caso es que el lenguaje facilita la interacción y como humanos nos hemos dedicado a encontrar miles de formas de interactuar. Amistades, grupos sociales de intereses comunes, clubes deportivos y recreativos, bailes, etc, etc. Y en el centro de todas las actividades el lenguaje.

El lenguaje.

Toda esta introducción esta aqui para lo siguiente:

La pareja. El deseo sexual. La familia. Son todos elementos básicos de socialización y sin embargo si hay cosas para las que somos malos, es para usar el lenguaje dentro de estos elementos.

La pareja. Poner de acuerdo dos opciones, no imponer ni sentir que se le imponen a uno, intentar conseguir lo que uno desea al mismo tiempo que se intenta conseguir lo que la pareja desea. Y aun asi, las palabras se quedan cortas y nos da miedo decir ya no mas, o decir si quiero seguir adelante. Hay que aprender a hablar después de los 4 años.

El deseo sexual. Pedir placer y ofrecer placer. Complicado. Es algo muy central a nosotros y sin embargo nos la vivimos inventando un lenguaje alternativo. Me gusta y no me gusta es demasiado directo. Lo directo no es politicamente correcto. Hay que aprender a hablar después de los 4 años.

La familia. Intereses encontrados. Confianza. Cercanía. Las personas que comparten lo mas posible un lenguaje. Y aun asi la violencia intrafamiliar supera por mucho los casos donde la comunicación logra resolver el problema. Hay que aprender a hablar después de los 4 años.

En fin.

Una invitación franca a volver a aprender a hablar. Aunque sea después de los cuatro años y cueste mas trabajo que antes.

1 comentario:

Anónimo dijo...

no mucha boleta